Hotel Parrilla El Zangano

Fuimos a comer el domingo 29 de octubre, coincidiendo con la Feria de la Miel de Boal. Tenían un menú Especial de 20 euros por persona. Pote asturiano o Ensalada Mixta de primeros. Parrillada de carne o ternera Asada de segundos. Podría decir que no os va a defraudar si coméis aquí,aunque tampoco os va a dejar sorprendidos ! El restaurante tiene varios comedores,amplios,y las vistas a la montaña son bonitas!! Aparcamiento no muy amplio!! La atención del personal muy buena!!

¡¡EXCELENTE!! LLama la atención su extraordinaria limpieza, tanto de las habitaciones como de las instalaciones. La comida es, sin lugar a dudas, sensacional, tanto en calidad como en variedad y abundancia. Las habitaciones, las cuales tienen terraza natural todas ellas, como el restaurante, están con vistas al paisaje rural, montañoso y verde de Boal, todo ello muy bonito y tranquilo, en el que se duerme muy bien y en silencio. La atención y el servicio es muy cercano y amable por parte de la familia dueña de este establecimiento. Todas estas cosas configuran una factura que sorprende gratamente por su relación calidad/precio He tenido que rebuscar mucho para encontrar algo negativo y solamente he encontrado el que las sillas del comedor son algo pesadas cuando tratas de moverlas. Somos un matrimonio jubilado residente en Madrid, que casi todos los años pasamos una semana en esta región y hemos estado varias veces en esta localidad y en este hotel y pensamos seguir repitiendo y aconsejándolo

Venimos dé Mexico y venir al zángano es una visita obligada, Excelente comida, el servicio siempre amable y las vistas lo mejor!!! Lo recomiendo ampliamente! Ya vengas en familia o en pareja la pasarás muy bien !!! La villa de Boal es preciosa para recorrer.

Restaurante Parrilla en un local muy poco acogedor dentro de un Hotel a las afueras del pueblo. Parece una nave industrial con un acceso feo, incómodo y difícil. Pero, bueno, lo peor es la atención al cliente, antipáticos, prepotentes ... sin la más mínima empatía o amabilidad. Estuvimos una noche cenando y, viendo la parrilla y a pesar de lo dicho, a los tres días volvimos a darle una segunda oportunidad y fuimos a comer. La "nave" estaba llena, pero había varias mesas libres en el interior. Todo lo que escuchamos fué el típico "¿tienen reserva ?", y a partir de nuestro "no" parecía que molestábamos. No lo recomiendo en absoluto. La carne a la brasa no me pareció mala, pero al final no es un sitio para disfrutar y está mal atendido. Creo que morirá de éxito, en breve. Y no es barato ¡¡¡

Recomendado. Fácil de encontrar. Hotel agradable, limpio y tranquilo. Habitaciones amplias con todo lo necesario. Restaurante-parrilla con comedor grande y terraza con vistas. Todo muy correcto en calidad-precio.

Todo ha ido perfecto lugar ubicación natural y un hotel para estar como en casa el servicio muy bueno el almuerzo sencillo pero de calidad. Por poner un pero a mi parecer las camas no son todo lo cómodas que a mi me gustan. Las noches una maravilla en la terraza del restaurante