Esperaba un poco más, se contacta contigo por cada detalle antes de la llegada, sin embargo, ya en el sitio, si llegas de noche falta mucha iluminación, la cena estuvo bien, pero el sitio es bastante frío, y me refiero a que podrían poner un poco más de calefacción en su comedor. La gran decepción fue el desayuno, buffet escaso, pero independiente de eso, la atención pésima. Llegamos media hora antes de que concluya, pedimos un poco de leche, primero trajeron un cuenco bastante pequeñito pero cortado, se lo mencionamos e indicaron que no había más. Total que esperamos un montón para nada. Resalto el balcón de la habitación que da al río, Bonito y Agradable.
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