Aparthotel Camp El Planet

Acabamos de marcharnos de este establecimiento, donde hemos estado alojados cinco noches. Y nos hemos marchado un poco tristes. Es como si nos fuéramos de nuestra propia casa. Asi nos hemos sentido durante toda la estancia, como en nuestra propia casa. Erik y Elin, los propietarios de este pedacito del paraíso que está en la Tierra, son muy discretos y sobre todo muy hospitalarios. Se nota que son de origen nórdico. Les vamos a echar de menos, y también a su perrita husky "Vega" una perrita muy buena y bien educada, muy amable con los huéspedes. Es el único perro al que no he oido ladrar jamás. Camp El Planet es un lugar confortable, muy tranquilo, y situado en un lugar privilegiado del mejor litoral de Alicante, Calpe-Altea-Albil-Benidorm. Desde este hotel te puedes plantar en cualquier playa en unos pocos minutos y luego regresar a descansar a este remanso de paz, silencio y tranquilidad, que es Camp El Planet. Las habitaciones son muy amplias y en excelente estado de limpieza. Con unas vistas impresionantes desde la propia habitación. La piscina, impoluta y sólo hay 11 habitaciones, con lo que no hay ninguna masificación en su uso. El establecimiento cuenta con un lugar habilitado en su interior para aparcar el coche con absoluta privacidad y seguridad. No se puede pedir más, y además no es nada caro. Estoy convencido de que Erik y Elin han creado este establecimiento, no para hacerse ricos, sino para vivir una experiencia personal y ofrecer su casa y el fruto de sus sueños a los demás. Vamos a echar de menos los suculentos desayunos que nos preparaba Elin todas las mañanas y yo especialmente voy a echar mucho de menos el hilo musical que Erik nos ponía para amenizar el desayuno ¿ en qué lugar del mundo te ponen hoy en día al gran maestro Bob Dylan a las 9 de la mañana? Don’t Think Twice, It’s All Right. Os aconsejo que vengáis a conocer este aparthotel. No saldréis defraudados.

El lugar es maravilloso. La atención de los dueños inmejorable. Desayuno y alojamiento perfectos. Tranquilidad pura, venía buscando serenidad y la he encontrado. ¡Un diez! No tiene ni una pega porque el estar retirado del pueblo le da más encanto todavía. Volvería sin dudarlo.