Hostal O Forno

Hotel acogedor en el pintoresco puerto de O Barqueiro. La habitación muy grande y limpia y el personal muy amable. Destacamos, además, las vistas espectaculares a la ría desde la habitación superior. Muy recomendables también los platos del restaurante. Sin duda una opción ideal en un destino sorprendente.

Località molto carina e autentica, pochi turisti, hotel sul porto. Purtroppo l’offerta delle stanze non corrisponde al sito web. La nostra stanza doveva essere deluxe con vista mare è una grande vetrata: stanza piccola, 1 piccola finestra, letto alla francese, 1 solo cuscino sintetico, cerata sul materasso (che sudata), doccia nella vasca. Abbiamo protestato con gentilezza ed invece di farci un piccolo sconto si sono impuntati. Peccato!

Un lugar con encanto, el entorno, la habitación, todo. El desayuno es a la carta, pudiendo elegir entre un amplio abanico de posibilidades, y sentado en una terraza, disfrutando los primeros rayos de sol.

Hotel pequeño muy limpio y nuevo en un sitio precioso, lo único malo es que no tiene ascensor, tiene 3 pisos, personal muy amable y profesional, el restaurante con una SUBLIME, hemos comido unas almejas inmejorables, unas croquetas de merluza impresionantes de tamaño y sabor y un rollo de bonito SUBLIME, le han dado un premio, los postres caseros y el servicio perfecto, raciones abundantes y precio muy bueno, hemos pagado 56€ por comer como reyes.

Instalaciones correctas y buena limpieza de la habitación. Personal muy amable y trato familiar. En nuestro caso la habitación para dos personas 60 €.con muy buenas vistas al Puerto. El desayuno en las propias instalaciones por 5 € por persona adicionales.

Excellent rapport qualité prix les plats typiques de la région poulpe, calmars préparés très simplement avec toutes les saveurs de la mer pour un prix défiant toute concurrence un régal le personnel aux petits soins un vrai bonheur. Établissement très bien tenu propreté irréprochable.

Cenamos un pulpo exquisito,y una tortilla de relumbrón en un enclave de cine.Un buen godello,una buena compañía,y un trato a la altura de las circunstancias.Quizás habría que vivir la experiencia para entenderlo.

Très bel hôtel qui donne sur le port- le port vaut le détour . Allez y passez une nuit l’endroit est charmant. Les chambres sont propres et ont vue sur le port pour certaines. Le restaurant vaut le détour : meilleur endroit pour manger des produits locaux. Ils ont un super cuisinier. Nous avons testé plein de choses et tout était vraiment délicieux. Le petit déjeuner est simple mais très bon ( meilleur café du séjour) .

Trato exquisito, la habitación estaba muy bien y ya nos quedamos a cenar en el restaurante, nos dejamos aconsejar y acertamos, una excelente cena. Al final el precio se disparó un poquito por la botella de vino, pero todo estaba muy buenos. Sin duda volveremos.