Hostal Los Oteros

Lugar tranquilo para descansar limpio y muy buena decoración. Detalle incluir el desayuno

El menu muy caro de 30€ y las cantidades y la calidad no corresponden al precio. Por otro lado les han servido a los niños un plato de macarrones blancos con tomate sin chorizo y sin nada y 16€ cada racion me ha parecido un engaño total. Prohiben indicando en la carta poder compartir ningun menu. La verdad que me he sentido engañada a la cara, no volveré jamas. En la carta ponia 14€ la racion de alcachofas y en la factura ha cobrado 16€, he hablado con la dueña pero no entraba en razones.

A todos los clientes de hoy de distintas mesas les cobran 13 + el cafe 14,50 A mi que soy un trabajador autónomo por llevar corbata me ha cobrado 16 + el café 17,50. Dicen (y mienten) que el menu son 16 y que hacen descuento a los habituales. Mentira, los no habituales pagamos esa burrada de menú paea comoebar los descuentos...muy poca vergüenza. Lo denuncie hace varios años y hoy he vuelto y siguen pero ahora te clavan 3 euris mas que al resto. Aconsejo seguir mexia hora mas y en Sasamon en El Castillo cobran a todos igual y se come mas y mejor14,5 con el café...)

Un hostal nuevo , limpio y una atención súper buena Tienen un vino rosado natural de cosecha propia que está buenísimo Las habitaciones y el sitio están súper cuidados y muy limpios Las instalaciones son nuevas y se come muy bien

Pues un Hostal para dormir poco por los ruidos de las plantas de arriba ( me toco dormir planta baja) pero con 4 personas el ruido no te deje dormir. Todo de madera y mal insonorizado . La cama malísima.

La verdad es que no se por donde empezar, fue un fin de semana de lo más subrrealista en cuanto al hospedaje en este hostal. En principio el encargado nos dejó bien claro la exigencia de puntualidad en cuanto al check in el viernes a la tarde, cumpliendo por nuestra parte pese a los horarios que manejábamos. Una vez allí quisimos tomar un refrigerio en el propio bar del hostal, desistiendo de esa idea por la cara puerro que nos puso el encargado así como la milonga que nos contó, de que iba a cerrar en cinco minutos. ( No eran las nueve de la noche). Después de pasar una noche llena de ruidos , que parecía que teníamos al ballet ruso en la habitación, bajamos a desayunar al comedor a la hora pactada con el señor en cuestión insistiendo mucho en la puntualidad, que nosotros cumplimos. Después de pasar el día conociendo la comarca volvimos al hostal y el cara puerro nos recibió con la misma monserga del día anterior, de que iba a cerrar al solicitar el refrigerio en el bar. Al día siguiente a las nueve en punto bajamos al comedor para desayunar cumpliendo a rajatabla con el horario pactado y tras pasar 25 minutos de las nueve y que allí no aparecía ni Blas, decidimos llamar al propio hostal por teléfono. Nos contestó este señor con una voz de ultratumba y se apresuró a decir que estaba ocupado...por no liarla callamos y esperamos el desayuno ya rozando las diez menos cuarto de la mañana. Una vez pasado este tiempo nos sirvió unos cafés blanquecinos , fríos de nevera , y al recrimin****lo volvió a preparar otros del mismo pelo...nos volvimos a quejar y en vez de disculp**** gallito nos dijo que el café estaba dentro de la taza, vamos una respuesta que ni Einstein la hubiese dado mejor....al traernos la tostada que solicitamos, la tarrinita de aceite para untar el pan, nos la dio abierta y con la mitad del aceite, que por cierto el paisano no se inmutó al comentárselo...en fin un despropósito tras otro. No recomendaría este sitio para nada, poca profesionalidad sin duda y es que a muchos este desempeño les queda enorme!!!!

Fatal el trato recibido por el PROPIETARIO, una y no mas, nunca mas volveremos, no lo aconsejo para nada!! Hay otras muchas opciones donde seguro te van a tratar con respeto, en este Hostal Los Oteros como digo no es el caso!! El buen trato brilla por su ausencia!!!

Mencion especial al buen servicio y amabilidad de María (camarera), y al trato nefasto a la misma desde la cocina para la salida de platos. Nos ha violentado mucho el trato vejatorio hacia una persona que durante todo el tiempo que hemos estado ha hecho un trabajo intachable. Comida correcta.

Estuve con mi pareja alojado un fin de semana. Todo resultó mejor de lo esperado. La comida buenísimo, las camas cómodas, el agua con fuerza, el desayuno bueno y el trato inmejorable. ¡Repetiremos segurísimo!