Hotel El Tilo

El hotel está muy bien situado para realizar excursiones, tanto de mañana, como también de tarde, por una gran extensión de Cantabria y Asturias. Está muy bien atendido por su propietario Pedro y su familia. La comida no puede ser mejor. La cocina la atiende la madre de Pedro, que es una veterana y excelente cocinera. El trato maravilloso. Los precios muy interesantes. ¡NO SE PUEDE PEDIR MAS!.

Tudo bom, mas saliento : Logo à chegada à receção, o Sr. Pedro, ofereceu-nos três garrafas de água gelada em consideração aos 47 graus do exterior. Uma avaria no nosso carro e deu-nos as indicações, as oficinas, com recomendação sua. O nosso filho só come cereais, o que não havia. Deu 20 euros a um dos funcionários e ato contínuo tínhamos uma caixa de Kelloggs em cima da mesa. No check-out, ofereceu-nos uma caixa com bolinhos regionais. Sempre com um sorriso, simpático, Decoração rústica, alusiva à atividade regional, elevador e o melhor pequeno- almoço até agora, muito muito variado e em quantidade. Camas do melhor, casa de banho gigante. Estávamos à espera de12m de quarto, de acordo com o site, mas o quarto era maior do que isso e com uma varanda Muito aconselhável.

Muy bien situado, tanto para ir a los Picos de Europa como a la playa. Destacar la gran amabilidad de todos trabajadores y lo bien que te asesoran sobre diferentes excursiones para hacer. El desayuno y la comida buenos y casero. La habitación correcta: amplia, limpia y con buenas vistas al río. Gracias Pedro y todo el personal, sois un buen equipo. Seguro que volvemos.

Nunca, jamás, ni alojándome en un hotel de 5 estrellas me han tratado mejor. No se puede ser más atentos ni más amables, con mención especial a la comida tan rica que hace la veterana cocinera. Es estupendo despert**** con el canto de las aves, pues el hotel está en un sitio muy tranquilo y bien insonorizado. La ubicación es estupenda, a poca distancia de un montón de lugares a visitar, como Cangas, Picos de Europa, Potes... No puedo olvidarme de mencionar la Senda del Deva, que comienza al lado del hotel y es una maravilla poder pasear descubriendo todo lo que ofrece el curso del río, con el discurrir del río y el trino de los pájaros como fondo. El jardín, con terraza/comedor acristalada, es una maravilla y tiene vistas espectaculares

Muy bueno el cachopo, tenía ganas de probarlo y la verdad que estaba riquísimo. Ya hemos ido en otras ocasiones y estamos muy a gusto. El personal es de 10. Trato muy amable. Repetiremos porque es nuestro sitio de encuentro ideal.

Fuimos 5 familias con niños. Alojamiento con desayuno ( abundante y rico) Bien en limpieza, muy atentos y siempre buenas caras. Agua de bienvenida y cuando quisieras había a tu disposición, y al irnos nos dio una caja de corbatas de unquera a cada familia. Íbamos con bicicletas para hacer una ruta y nos las guardaron sin problema. Tener claro que es un 3 estrellas en un puebla asturiano pequeño, partiendo de ahí, sitio para volver.

Es la segunda vez que vamos a este hotel familiar y la verdad es que es un lujo.. tanto por ubicación para moverte por la zona.., como por su excelente comida casera, o el entorno que lo rodea.. pero por encima de todo.. por el trato profesional y cercano recibido por su dueño, Pedro, así como por su equipo (mención especial a Victoriano y Juanra.. que son unos cracks..). Da gusto poder hospedarte en lugares como este, que te hacen sentir como en casa. Os damos las gracias y repetiremos seguro

Hotel tradicional en Panes, a orillas del Río Deva y junto a un excelente parque en sus orillas . Tranquilo y acogedor establecimiento aunque necesite algunas reformas estructurales. Amabilidad por doquier, serviciales al máximo. Botellines de agua por cortesía en la recepción Te hacen sentir como en familia. Precios moderados y cocina casera de calidad y abundante, con variedad de desayuno tipo bufé. Para unos días de paz y sosiego es una muy buena opción.

El hotel está muy bien situado, te lo encuentras nada más llegar a Panes. Hay mucho sitio para aparcar. Está todo muy limpio. La habitación que nos tocó es muy amplia y las camas muy cómodas. Teníamos terraza con unas vistas preciosas al río y a la montaña. El desayuno está muy bien. Mi hijo quería desayunar cereales de chocolate, pero no tenían. Son tan amables que al día siguiente había una caja de cereales preparada para él. Hemos almorzado en el restaurante del hotel un día. Muy recomendable para probar la comida casera asturiana. La menestra de verduras que me tomé era una delicia. Hemos estado muy cómodos en el hotel y muy tranquilos con respecto a las medidas de prevención frente a COVID-19. Todo el personal llevaba en todo momento mascarilla quirúrgica o FFP2 perfectamente colocada. Es obligatorio usar mascarillas en las zonas comunes del hotel. El restaurante era en interior, pero tenían todas las ventanas abiertas y estaba perfectamente ventilado. Aunque no tenga nada que ver con el hotel, me parece útil comentar que el coche nos dió un par de problemas durante el viaje y en Panes hay varios talleres mecánicos. Nos atendieron muy bien tanto en el taller Dani como en el taller de chapa y pintura que está al lado.