Scenic12604700965
December 15, 2023
Si se pudiera, le daría un 20 en lugar de un 10. Había leído buenas opiniones, pero supero las expectativas. Decir que es un hotel muy familiar y te tratan como invitados en una casa. El personal es súper agradable y atento y qué decir de Antonio el dueño, la amabilidad personificada. Es un hotel pequeño situado junto a la Alameda, a cinco minutos del casco histórico y a 10 de la catedral. Ubicación excelente. Es muy tranquilo y silencioso con habitaciones no muy grandes pero muy cómodas. Algunas de ellas tienen terrazas con mirador acristalado. La limpieza es de 10. Los cuartos de baño son pequeños, sobre todo la ducha, pero es suficiente para el aseo. En la pequeña cafetería sirven dos tipos de desayuno. Uno de 5 euros y otro de 8 más completo aunque en ambos se puede repetir. Riquísimo el pan gallego y la tarta de Santiago. Hemos regresado tan contentos que seguro que repetimos y lo recomendaremos a todo el mundo.
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