El hotel tiene ya sus años, pero se conserva muy bien. El acceso es un poco incómodo, o muchas escaleras o un ascensor sólo para subir a recepción. La recepcionista fue muy simpatica y eficiente, y nos concedió todas las peticiones que le solicitamos, dándonos la habitación con mejores vistas hacia el río. La habitación amplia, pero un poco antigua. La terraza justita pero con vistas maravillosas. Lástima que la parte del hotel que no está operativa sirva de palomar.
Translate