La atención y servicio del personal fue siempre excelente. La comida fue extraordinaria, desde snacks como cenas y comidas formales en los restaurantes. Las instalaciones y habitación muy bien también.
Lo malo: pocos camastros que no tienen costo extra, por lo que si llegabas después de las 8:30 am era difícil encontrar camastros en la alberca o en la playa y terminas pagando 80USD que no se incluyen en la tarifa All-Inclusive. Menos camas, más camastros.
Los restaurantes tienen poca capacidad (aprox 14-20 mesas) por lo que las listas de espera son de una a dos horas o más. Vale la pena la espera por los platillos y menús que son excelentes, pero deberían tener aplicación de reservas u otro método para que puedas comer sin esperar tanto tiempo para ingresar
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