Habíamos reservado un apartamento en el Hotel Dorada Palace de Salou el 18/09/2.023. Ya habíamos estado cinco años consecutivos en él. El 25/03/2.024, una semana antes del viaje, cuando ya no tenemos margen de maniobra, se nos informa de que el hotel ha sido comprado por Portaventura, que está en obras y que se nos alojará en el Hotel Pirámide de Salou. ¿No parece que esto es actuar de mala fé? Somos la pareja de abuelos, una niña de 14 años y un niño de 12, por lo que habíamos reservado un apartamento con tres camas. En el Pirámide se nos ofrece una habítación con dos camas grandes. ¿ Cómo podemos organizarnos para dormir? Nuestro caso era similaral de otras familias, también clientes tradicionales del Dorada. Nuestro agradecimiento al director del Dorada Palace, que se trasladó al Pirámide durante horas, hasta lograr que nos fueran asignadas dos habitaciones contiguas con dos camas cada una. El Pirámide es un hotel limpio y bien mantenido, al nivel de un cuatro estrellas. Su personal roza la excelencia en el trato con los clientes. El grave problema el Pirámide reside en el servicio de almuerzo, al mediodía, que no se ofrece en un restaurante, sino en un chiringuito montado al lado de la piscina, al aire libre, con viento y frío, con una inaceptable calidad y total falta de variedad. Se nos ha ofrecido un servicio de "bufet", por llamarle de algún modo, en unas instalaciones no adecuadas, que podrían servir para ofrecer servicio de snaks de piscina entre horas, pero nunca como servicio de comedor para almuerzo. Percibíamos que el personal del hotel estaba avergonzado, por no poder ofrecernos un servicio adecuado. Ellos no no podían corregir el mal servicio derivado de las instrucciones impartidas por la dirección. Todo nuestro agradecimiento y respeto por todo el personal del hotel, que se han esforzado por atrendernos lo mejor posible. Nuestro rechazo a la dorección
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